Los estudiantes reflexionan sobre aspectos positivos y aspectos por mejorar de su experiencia con el curso. Observan y comentan recursos e ideas concretas para continuar desarrollando sus proyectos. En base a ello crean una “hoja de ruta” estableciendo metas y pasos a seguir. Para concluir, reciben una semilla simbólica del camino que continúa en su desarrollo como emprendedores sociales.